La primera etapa entre Fuentealbilla y Alcalá del Júcar no defraudó a nadie y ofreció un espectáculo del más alto nivel deportivo. La carrera, que arrancó a las nueve y media de la mañana, con unas temperaturas más altas de lo habitual en estas épocas del año, vaticinaban ya, que se viviría una jornada calurosa y así fue con el paso de las horas, aumentando considerablemente a lo largo de la mañana, y llegando ya a ser sofocantes a partir de las 13 horas. Sin embargo, esto no restó un ápice de espectáculo a la prueba, haciéndola si cabe todavía más exigente y dotándola de la tan característica épica que suele ir muchas veces implícita con el deporte del ciclismo.

En la categoría masculina los primeros compases de la prueba eran de tanteo, ya que con tanto “gallo” había cierto respeto y miedo para comprobar quien era el primero en tomar la iniciativa. En la categoría femenina sin embargo, Sandra Santanyes tomó la iniciativa desde los primeros compases de la prueba, imponiendo un fuerte ritmo que no podía ser seguido por ninguna de sus contrincantes. Sólo Desirée Moya que cuajó una excelente actuación, mantendría ligeramente el tipo frente al descomunal ritmo impuesto por la catalana, que avanzaba inexorable hacia la línea de llegada.

Los kilómetros transcurrían y ya empezaban a verse los primeros movimientos claros para optar a la victoria final. Yago Sardina era uno de los que lo intentaban con más ahínco. El corredor con más victorias esta temporada en el Circuito se destacaría ligeramente, seguido muy de cerca por Xavi Borrás, Ignacio Ariel Gili e Ismael Hernández, que no querían perder comba respecto a la cabeza de la prueba. Xavi Borrás lo seguiría intentando y finalmente se destacaría de todos los corredores, marchándose en solitario a más de sesenta kilómetros para llegar a la línea de meta. Esta maniobra que al principio podía parecer muy arriesgada, habida cuenta del gran kilometraje que quedaba todavía por completar, fue el movimiento más acertado del día, ya que la diferencia no paraba de aumentar, quedando el valenciano en una situación realmente ventajosa, ya no solamente para adjudicarse esta primera etapa, sino para ganar la general, ya que esta prueba consta de dos etapas y el conseguir una diferencia holgada en la línea de meta lo dejaba en una situación muy beneficiosa para optar a la general final. Los kilómetros transcurrían y el hueco parecía ya insalvable, centrándose más los perseguidores en luchar por la segunda plaza, que en dar caza a Xavi Borrás del Olympia Factory Team. Al final, entrada victoriosa de Borrás, que llegó a meta casi tres minutos antes que sus perseguidores, un grupo compuesto por cuatro corredores que entraría en un apretadísimo sprint que se decantaría del lado del corredor del Manzanares-Berria Racing Team, Yago Sardina, dejando claro que además de ser un dominador a nivel de la provincia de Albacete, es uno de los mejores corredores de la disciplina de maratón a nivel nacional. El tercer lugar del cajón fue a parar a Ignacio Ariel Gili, que hace menos de un mes subió también al podio, pero de la prestigiosísima Titán Desert.